Si aplicamos esa frase a lo que, tras las elecciones del 28M, ha quedado de Unidas podemos, podemos asegurar que están: jodidos, jodidas, jodides
“El pueblo no renuncia nunca a sus libertades sino bajo el engaño de una ilusión” Edmund Burke, escritor y político británico
El 15M en la Puerta del Sol fue el inicio de una farsa monumental apoyada en una ilusión creada para ilusionar a ilusos cuyas mentes y corazones estaban hechos polvo tras las crisis que corroyeron España en esos años. Los líderes de lo que luego fue Podemos aprovecharon la corriente para, desde sus atalayas comunistas, alcanzar el poder absoluto. Hoy, tras 12 años de promesas incumplidas, leyes estúpidas e inútiles, mentiras y patochadas sobre el clima, el feminismo y el bienestar animal que han mostrado la verdadera faz de quienes aprovecharon para su solo beneficio aquel movimiento. Los ciudadanos que acogieron un proyecto falso orientado a ilusionarlos y así, manipularlos, se han caído del guindo. Los Pablo Iglesias y adláteres que imbuyeron en los ciudadanos su proyecto dictatorial vistiéndolo de proyecto social justo y equitativo, haciéndoles creer que cuando llegaran al poder la mujer alcanzaría la tan ansiada superioridad sobre el hombre, los ricos pasarían a ser pobres y los pobres ricos, las gripes desparecerían, los ciudadanos, por el mero hecho de haber nacido, tendrían una paga vitalicia, los niños y las niñas se doctorarían a los 15 años, el trigo crecería mucho más, las lluvias serían controladas y no habría sequías, las fuentes manarían leche y miel, la vivienda se alcanzaría sin tener que pagar hipoteca y un largo etc. de opios mentales que estos traficantes de estupefacientes sociales imbuyeron en las mentes y corazones de unos ciudadanos estuporizados por las crisis y presa fácil de quienes mercadeaban con las necesidades y carencias de una sociedad que, habiendo perdido la ilusión, la volvieron a encontrar en las promesas de un partido comunista al que dieron el nombre de Podemos. Pero la ilusión en sí misma nada vale si no está apoyada en los pilares de una realidad que camina junto a ella. Ya sabemos que los sueños son solo sueños. Y Podemos irrumpió en el Congreso con 71 diputados. Y se las prometían felices. Y borrachos de éxito, murieron poco a poco por el mismo éxito. En las siguientes elecciones se quedaron en 37 diputados y comenzaron a desbarrar con el “si es si”, con los derechos de las ratas que no de las personas. Y acusaron a los medios de comunicación y a la extrema derecha de su fracaso sin entender que los ciudadanos estaban saliendo del sueño ilusorio en el que cayeron el 15M. Y llegaron las elecciones del 28M y se desmigajaron, se diluyeron como un azucarillo en agua y ahora están jodidos, jodidas, jodides porque Podemos cree que existen, al menos tres géneros según se desgañitaba en plazas y colmados Irene Montero franqueada por Rodriguez Pam y demás especímenes feministas.
En julio habrá elecciones generales por la gracia de Pedro Sánchez y Podemos que, devino en Unidas Podemos como si el género masculino para nada sirviera, volverá a perder, aunque se mezcle en las sedas glamurosas de Yolanda Díaz. Y quedarán como en las municipales del pasado 28M: jodidos, jodidas, jodides como corresponde a quienes nos trataban y tratan como niños, niñas, niñes.
MAROGA