La Historia está ahí y los datos son contrastables, la izquierda destruye más que cualquier bomba atómica, y aún padecemos las consecuencias propiciadas por autocrátas que manejan y manipulan a la sociedad con promesas ‘buenistas’ que sólo embaucan a trabajadores, hombres y mujeres, impiden la iniciativa privada, espantan la prosperidad, arruinan al país y hacen una población de adectos exclusivos a sus gobiernos
Antes del 18 de Julio del 36, a cargo del social-nazionalismo, fueron fusilados más de 11.000 personas, inocentes y desarmados, solo por su condición de ser católicos. Consiguieron dividir a España y provocar revueltas, odios y rencor
Quemaron miles de iglesias, calcinaron centros culturales, dilapidaron riquezas y expoliaron al país hasta la más inquisidora pobreza pública, incluso se llevaron los recursos económicos (ver ‘El oro de Moscú’)
Violaron a innumerables mujeres, arrasaron con el patrimonio histórico – artístico y condenaron al país a la hambruna y a la posterior ‘cartilla de racionamiento’, impuesta por Franco, ante el desolador plan de vida de los españoles y debido a la desaparición de los recursos propios
Esto sucedió antes, durante y después de la Guerra Civil del 36, en el periodo de la II República, gobiernos de izquierda comunistas cercanos a la URSS (hoy la Rusia de Putin). La izquierda fue la creadora de la ley ‘vagos y maleantes’ y del desorden público imposible de sostener
Solo en España han destrozado más que cualquier bomba atómica, y mucho más dañina que las ‘bombas de racimo’, ya que aún se extiende el dolor y las consecuencias del sectarismo y fanatismo de la ideología más retrógrada e involucionista para la vida de cualquier pueblo
Anián Berto (C)
Periodista – escritor