Maika Castro
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Vivo desde hace tres años en Villaverde Bajo (Madrid), concretamente
en Avenida Rosales, y no se pueden imaginar el nivel de peligrosidad de
esta carretera (porque a pesar de ser una Avenida, su aspecto y peligrosidad es la de una carretera comarcal), ni el estado total de
abandono en el que nos encontramos, tanto por parte del Ayuntamiento como de la Comunidad de Madrid.
Cada día cientos de personas nos jugamos la vida cruzando esta
carretera en tramos en los que los coches circulan a 80 km/h (a pesar de estar limitado a 40), tramos urbanos que no tienen absolutamente ningún limitador de velocidad para los coches, sin pasos de peatones en zonas que viven miles de personas, sin semáforos, ni rotondas, SIN ACERAS…
Ya ha habido numerosos accidentes, aunque sin víctimas por el momento. Este no es el único problema, ya que la Avenida está descuidada, los parques abandonados y convertidos en escombreras, las papeleras y alrededores llenas de basura porque el Ayuntamiento sólo las vacía de vez en cuando, las calles y aceras hundidas por culpa del tráfico pesado, lo que, unido a la mala conservación de las alcantarillas, hace que cuando llueve se inunde en algunos tramos.
Nos hemos quejado reiteradamente al Ayuntamiento y a la Comunidad de Madrid, sin que nadie nos escuche, más bien al contrario se han reído de nosotros. Vergonzoso. Señores, el tercer mundo está en Madrid, concretamente en Avenida Rosales.
Los vecinos del barrio hemos creado una web con fotos de la zona donde explicamos la situación, además de recoger firmas para que se solucionen los problemas. Les invito a que vean la web para que se den cuenta de la situación en la que nos encontramos miles de vecinos de Villaverde, y, si lo consideran oportuno, firmen para apoyarnos y ayudarnos a conseguir una Avenida segura y transitable.
Este es el otro Madrid, el Madrid que nadie conoce, y al que nadie le interesa, el que habría que mostrar a los turistas y salir en los telediarios, las vergüenzas de Madrid.
