Diego Palacios Soto
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Le transmito mi preocupación por la retirada del Belén en el colegio de
Mijas (Málaga) por parte de la Directora del centro. Y es preocupación
por el sistema que quieren (o al menos, quiere la Directora) imponer
para la integración de las diferentes etnias y religiosas en nuestros
colegios.
La navidad es una tradición implantada en España más allá de la
religión, como puede notarse por los decorados de todos los
ayuntamientos (laicos) de la geografía española, y de los días festivos
que casi todos podemos disfrutar estas fechas. No es para nada
excluyente con diferentes etnias o razas, si no integrador. Es un buen
momento para que alumnos de otras religiones conozcan nuestras
tradiciones y expliquen las suyas para lograr la integración
«multicultural» y no «acultural». Ya nos hubiera gustado a los que ya no
vamos al colegio el poder haber aprendido sobre las tradiciones de
diferentes partes planeta de tan buena mano como pueden los alumnos del
colegio de Mijas.
Hasta donde he tenido noticia dicho belén ha sido realizado en la clase
de la asignatura de religión del centro, e independientemente de que el
que escribe estas líneas esté de acuerdo o no con la existencia de estas
clases comprende y le gusta la tradición del belén, lo han hecho todos
de buena gana, espero que la Directora no se saltara ese pequeño
capítulo de la infancia. Es comprensible que no se quiera herir la
sensibilidad de la gente de otras religiones, pero hasta donde recuerda
mi memoría nuestros belenes no tenían capítulos sangrientos, matanzas,
ni vejaciones de figuras que representaran a otras religiones.
Sin más me siento en el sofá y observo como en un anuncio de la
Dirección General de Tráfico se escucha a un niño leer su carta a los
Reyes Magos, protagonistas de los belenes. Espero que la Directora del
centro no esté pensando en tomar medidas legales contra la DGT, a mí me
gusta el anuncio.
