Claro que los Rojos son los más expertos
En quitarnos el caballo con sus bridas,
Su montura y espuelas incluidas…
Con lo del corral, además de los huertos,
En que hemos convertido campos desiertos,
Los verdes setos y praderas floridas,
También las semillas e insecticidas
Contra las plagas de insectos… Yertos
Parecía que estaban y de sus guaridas
Saliendo de pronto, como con entuertos
De parto, con el tul de la ira cubiertos,
Están por adueñarse de nuestras vidas…
El Sánchez, cabeza de estos mamertos,
Todo incluido,… ¡hasta de nuestros muertos!.
II
Sí señor Llarena: lo del tal Grande-Marlaska
Y lo de la tal Delgado es un Órdago a Grandes…
Si ella bebe en vaso vacío, él masca
Tornillos en este País, que no en Los Andes…
Están ambos dos más por ver que si usted casca,
Es porque no haber puesto una Pica en Flandes
En un asunto propio, y no porque la saña
De un juez belga humille a un Juez de España…
Si sus señorías no tienen en su Cartera
Más materia gris para ser ministro o ministra,
Sepan que los pondrán a parir en la Carrera
De San Jerónimo y allí donde registra
La Historia las señas de quienes por montera
Se ponen el honor de España… De esa larga ristra
De tarugos al por mayor que hacen alarde
De estar en el cargo por la cara… ¡Dios nos guarde!.