LO YA DICHO

LO YA DICHO

 

La verdad es que la Política es una carga,

Que tenemos que soportar toda esta vida,

Razón por la que esta vida es tan amarga;

Desde el momento que nos dan la salida,

Hasta la meta, la pena es corta, o es larga;

Si va con nosotros desde la cuna hasta la muerte,

Toda la vida con ella, … ¡ya es mala suerte!;

 

Instruida para tener la casa en orden,

Se ha convertido en el ama del cotarro;

Y le importa un pimiento el total desorden

Con que la gobierna, porque este despilfarro

Lo hace para que todos los Políticos engorden;

Que en su trajín diario de escoba y delantal,

Se haga la señora, … ¡claro que sienta fatal!;

 

Lo de que la Política es una marrana,

Ya se lo oí decir a la abuela de mi esposa…

Y tenía razón … No hay una sola mañana,

Tarde ni noche, que nos sorprenda con una rosa

Sin espinas, sople el cierzo o la tramontana …

Conmigo, ya nonagenario, si no me ha castra-

do, siempre se ha comportado como una madrastra;

 

Otra Política no nos da la Democracia:

Lo de cría cuervos y te sacarán los ojos,

Inculcado contra la Derecha por obra y gracia

De unos granujas es patrimonio de los Rojos:

Sin ellos cualquier Gobierno es una falacia;

Los que un día fueron vagos y maleantes,

Son ahora también vagos, … pero extravagantes;

 

A su más que oscuro pasado, el seguro

Del silencio le han echado, y sin puta idea

De la Política que han de seguir, por duro

Que parezca, bailando siempre con la más fea,

Pretenden escribir la Historia del Futuro …

Lo ya dicho: la pareja que su Ignorancia

Ha elegido para el baile, … ¡es la Extravagancia!.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Salvador Monzó Romero

Salvador Monzó Romero cuenta la feria según le ha ido y según le va, siempre ante la pantalla de la Televisión, reivindicando desde su sillón-bol, un tanto escorado a la derecha, su derecho a la crítica mordaz y ácida, pero con carácter moralizante.

Lo más leído