En carne no tienen el mismo peso,
Uno es abundante y el otro escaso,
Pero queriendo dárnosla con queso,
Uno y otro llevan el mismo paso;
Lo del Gordo y el Flaco tiene fama:
Del Ábalos y el Sánchez es el caso;
Distinto tamaño, pero igual escama:
Uno, pez espada haciendo cabriolas,
Y un merluzo el otro haciéndole la cama;
Viendo cómo se mueven en las olas
De la Política, al menos se espera
Que se cansen de tocarnos las bolas;
Más basto uno que esparto de estera,
Repite lo mismo, como un loro,
Que antes ha dicho el pollo-pera;
Cantando ambos en el mismo coro,
Hacer gorgoritos tienen a gala;
Que les tengan por piquitos de oro,
Les va como a un músico, pico y pala:
Hay que llamar la atención como sea,
Para no tener que ahuecar el ala;
Y si no hay cal ni arena, la tarea
Hay que continuarla a pie de obra,
Pues, si no otra cosa, verborrea
Al unísono, de largo les sobra;
Se han educado en la misma escuela
Del Psoe, y conocen la maniobra,
Que practican, por si acaso cuela,
Lo mismo dándonos gato por liebre,
Como en un souvenir su esquela;
A ambos ahora la misma fiebre
Les ataca, aunque ágil como un gamo
Al Sánchez, y al Ábalos como liebre
En boca de galgo, el mismo marchamo
Llevan… Como su Plan del Poder quiebre,
Sin que ni uno ni otro su aguja enhebre,
Al cubo el disco … ¡La Voz de su Amo!.