El nieto de la Carmena
Anda un tanto cabreado,
Pues, al irla, le ha dejado:
Lleno el corazón de pena
Y con el seso helado;
Salvo su noble querencia
A proteger la indecencia,
Y tener, con mano dura,
Madrid lleno de basura,
Poco más hay en su herencia;
Anda el Errejón tan triste,
Porque la Abuela-granero,
Pájara de mal agüero,
Sólo le ha dejado alpiste
Para su pico agorero;
Le dieron publicidad
A un Plan de Prosperidad,
Y no ha valido su ardid,
Pues han perdido Madrid,
Y ¡adiós! la Comunidad;
Más Madrid … Pero ¿más qué?;
Puede que a alguien le quepa
En la testa, y lo sepa;
Yo claro que no lo sé…
¿Lo sabrá acaso este trepa?;
Siendo ella tabla rasa,
Cántara vieja y sin asa,
No entiendo porque Errejón,
Si sólo suena a su son,
No se ha quedado en casa;
Siendo un Partido tan hueco
El Más Madrid, que hasta el eco,
Al oírlo, suena hueco,
Se entiende que le haga un hueco
En el mando … ¡a un muñeco!.