Salvo la aparición esporádica
Del tal Ábalos, los demás Ministros
Deben estar echándose la siesta;
Si el Gobierno precisa tomar árnica
Por algún soponcio, los suministros
Los aportan las que no están de fiesta,
Las cuatro o cinco Ministras en suma,
Con el Ministro que hace a pelo y a pluma;
Casi ellos se cuentan con los dedos
De una mano, y ellas con los de las dos
Y los de los pies, para poco o nada;
En todo caso para sus enredos,
Aunque yendo de exhibirse en pos,
Tiene el Gobierno buena fachada;
Sin ironía: muy pocos balcones
Y muchas ventanas, … ¡manda cojones!;
Más que un Gobierno, una Florería,
Donde, más que ramos para cumplidos,
Lo que hay son coronas para muertos:
Los que se va llevando cada día,
Por delante o detrás, los venidos
A menos, sólo por los desaciertos
De sus seis Ministros y once Ministras,
Ellos en una y ellas en dos ristras;
De cuantas hubo, esta es una tienda
Que mantenerla nos cuesta más pasta;
Nunca tuvo España un Gobierno
Tan cerca de la quiebra por dar rienda
Suelta a vender humo de paja … Gasta
Tanto que tememos irnos al cuerno;
Obligado ahora a echar el cierre,
Sigue en sus trece, erre que erre;
Con su Ahora, Gobierno, y Ahora, España,
Baja al ruedo … O sea, lo hasta ahora
Habido ha sido un simulacro …
Puede que siga dándonos caña,
Porque España le otorgue otra demora …
Pero este Gobierno ha sido un macro
Fraude, otro, que estando en su clima,
No podrá el Sánchez … ¡quitarse de encima!.