Del porqué hubo una guerra
Que la perdieron, los Rojos
Esquivan hablar de él;
La derrota les aterra,
Por lo que cierran los ojos,
Pues les angustia el pastel,
Que nos prometió la Izquierda
Y acabó siendo una mierda;
Pero solapadamente
Persisten con su porfía
De seguir ganarla aún;
No toleran que la gente
De Derechas todavía
Les recuerde que con un
Tiro, de monjas y curas
Llenaron las sepulturas;
Hablar ahora ya toca
De las víctimas de Franco,
Vil y cruel Dictador;
Y se les llena la boca
Poniéndolo en el blanco
De las flechas del rencor;
Hallan en ello solaz,
Que ni muerto viva en paz;
A los de Franco mataron
Por ser ricos o católicos,
Gente de olla y misa;
A los Rojos fusilaron
Por sus reposos bucólicos
Y el color de su camisa;
Para unos pues la fama
Y a los otros mesa y cama;
Hace tierno al caradura
Y caradura al tierno,
Quien manda a la Dictadura
Y a los Rojos: … Una al cuerno,
Y a éstos, … ¡paz y ventura!