Colgados los Catalinos
De sus amarillos lazos,
Les abre el Sánchez los brazos
En medio de sus caminos,
Sin dejar de dar bandazos;
Cada día es la dieta
Que nos sirven, sin más treta
Que la de buscar el modo,
Luchando codo con codo,
De hacernos la puñeta;
De casta le viene al galgo:
Sin abrir todos sus cercos,
Unos y otro son tan tercos,
Que, si acaso hacen algo,
Más mierda no hacen los puercos;
Si lo de la Independencia
Es un caso de conciencia
Para algunos catalufos,
Para el otro son sus tufos
Los que huelen a indecencia;
Con vestir a otro santo
El Sánchez es tan tozudo,
Que, aunque acabe cornudo,
Lo cierra a cal y canto,
Dejando al propio desnudo;
Mientras levante el puño
Con la firma y con el cuño
Del Gobierno este falaz,
Que no nos deje en paz
Siempre habrá algún cataluño;
Da igual que acabe en ino,
En ufo, uño, o en an,
Que en lo humano y lo divino,
Siempre habrá algún catalán,
Por donde amarga el pepino
Que nos dé, tal que el Rufián,
El Torra u otro vecino,
Unas veces al tan tan,
Y otras veces al pim pim,
Por san Oriol o san Quim.