La falta de regulación del sector dental durante el Estado de Alarma por parte del Gobierno está poniendo en riesgo los más de 320.000 puestos de trabajo que genera España, al no decretarse el cierre de las clínicas y establecer servicios de urgencias. Esto abocará a miles de clínicas a la ruina “y más desde que hoy, cuando se han prohibido los despidos” según denuncian los dentistas.
Un grupo de dentistas de toda España señalan que la decisión del Gobierno de hoy de no permitir los despidos pone entre la espada y la pared a miles de profesionales en todo el territorio nacional, dado que tienen que mantener la asistencia de urgencia, se ha prohibido los despidos y se les están denegando los ERTE forzosos en diversas comunidades autónomas.
La única salida para muchos será directamente cerrar, con lo que “de todos modos, se destruirá empleo y de forma irremisible”, explica uno de sus portavoces, el odontólogo Daniel Tarfur.
Dicho grupo, formado por 10.000 profesionales, ha promovido una petición en la plataforma Change.org para que el Ejecutivo decrete el cierre de las consultas dentales españolas, lo que permitiría la concesión de los ERTE forzosos que hoy se están denegando.
Tafur, señala que con la falta de acción del Gobierno “está jugando no sólo con miles de puestos de trabajo, sino con la salud de muchos ciudadanos. La mayor parte de los dentistas carecen de los medios para protegerse ante el coronavirus y pueden contagiarse y convertirse en un vector en la expansión de la epidemia, debido a las peculiaridades de este virus”.
Crisis IDental por toda España
Los odontólogos advierten que si tienen que mantener las consultas abiertas, con personal pero sin clientes durante meses, terminarán arruinando sus negocios. Ahora sólo atienden urgencias, que son muy puntuales, mientras las cargas económicas se mantienen. Por ello, reivindican que se establezcan lugares para la atención de urgencias dotados del material adecuado de protección y se cierre el resto.
Si el confinamiento se prolonga –advierten– muchas consultas no podrán asumirlo y tendrán que cerrar definitivamente. Los pacientes no podrán recibir tratamientos en curso y “será una crisis de IDental pero elevada a la enésima potencia”, explica Tafur.
Plantean que se siga los pasos de Reino Unido o Francia, que ha establecido atención telefónica, receta telemática y ha designado centros para la atención de urgencias con protocolos de protección. En este sentido, los dentistas plantean que sean centros públicos y privados designadas por el Consejo General de Dentistas de España. Así, podrían ser sillones dentales ubicados en los colegios de dentistas de cada ciudad, los centros de salud o incluso usar instalaciones de las universidades como en China, a la que acudirían los profesionales.
La centralización de la atención de urgencias dentales garantizaría las medidas de control contra el contagio del virus así como la disponibilidad de medios y material de protección, asegura Tafur.
Los dentistas recuerdan que lo primero ha de ser la salud de la población en estas circunstancias, por lo que el cierre del sector dental y la regulación de las urgencias sería esencial para contribuir a no extender la enfermedad.
Y en segundo lugar, el sector dental “va a quedar muy perjudicado” si no se toman medidas para solventarlo, por lo que la reactivación económica en este ámbito “va a ser muy complicada”, vaticinan los dentistas.
Por último, lamentan que el Gobierno esté ignorando al Consejo General de Dentistas de España, que representa a todo el sector, que también ha pedido el cierre de las clínicas. “Tendrían que escuchar y respetar al sector, el Consejo constituye nuestro máximo representante, desestimar su criterio como se está haciendo no es lógico”.