Al loro: le venga o no de casta, el que habla
Bien de la Sexta es porque se lleva una pasta gansa,
O porque tiene grabado a fuego en la tabla
Roja de su seso tanta inquina, que no se cansa
De echar sapos y culebras por su boca, bla-bla-bla,
Hasta el empacho y el toro de su ira se le amansa;
Secano donde solo germinan los abrojos,
Quienes en ella encuentran guita son los Rojos;
Otras metáforas: de escorpiones y serpientes
Nido, y de alimañas y lobos guarida,
Le hincan el guijón, las zarpas y los dientes,
Hasta dejarlos exhaustos y casi sin vida
A quienes, de la verdad auténticos clientes,
La sirven fría, no les abrase al ser oída;
Cantarles las cuarenta y llevarse las diez de monte,
Le espantan la burra, pero no hay quien les desmonte;
Una más, al revés: la Sexta es la mayor hoguera
Que tiene encendida la Inquisición de la Izquierda,
Con un Torquemada, que hay qué ver de que manera,
Tan soez e hipócrita, de la mentira la mierda
Convierte en rosas y la verdad en quimera,
Y ésta en humo y las rosas en la larga cuerda
De elogios a quienes en su convento instruidos,
Le siguen con salmos halagando los oídos;
Unas cuantas más y corto: profunda fosa
De la verdad; de la mentira, hermosa rosa,
Y del progreso y bienestar, flaca mariposa
Sin alas … Ésta es la Sexta …¡más alguna otra cosa!.