Quiero que quede claro
Que para mí los Rojos son personas,
Que pueden ser un faro
De luz, y si en el aro
De su alma ruedas, ya no te enconas;
No todos desde luego,
Pero de vez en cuando das con uno;
Y que no den el pego
En el obsceno juego
De la Política, ya con ninguno;
Metidos en Política,
Son como bueyes en fértil dehesa;
Pastan sólo en la crítica,
Seca pero prolífica,
De la insidia, con cama y mesa;
Si mutan las noticias
Con mala leche y siempre a su antojo,
Cambiando las franquicias
Del bien en inmundicias
Del mal, … ¿cómo puede ser bueno un Rojo?;
De lo que han sido y hecho
Siempre los Rojos, mejor no hablar;
Su historia no es un lecho
De paz, y cada trecho
Que han gobernado no ha sido un manjar;
Que son pues mala gente
Los Rojos, basta con una mirada
Al Gobierno presente,
En el que uno se siente
Dicen que bien … Y aclaro: ¡de eso nada!.