COMO SIEMPRE

COMO SIEMPRE

 

Como el tejado en una casa,

Tienen algunos también la cabeza,

El sitio donde suele haber goteras

Con el paso del tiempo, y no me pasa

A mí por mi firme naturaleza,

Pues, con más de noventa primaveras,

Tengo el cuerpo y la mente, dicho sea

Sin alardes, prestos a esta tarea

 

De hacer versos, poniendo a unos, tejas

De todos los colores, y la pringue

Quitándosela a otros que andan a ciegas,

A mi aire: ¡si no lo quieres, lo dejas,

Pero ahí lo tienes, a ver si se extingue

Tu mal de ojos, y no te la pegas!;

Así son mis versos, que llaman sátiras,

Con los que he escrito páginas y páginas,

 

Y si Dios me da salud, como creo

En su hijo Jesús, quien, látigo en mano,

Arrojó a los mercaderes del templo,

A los hoy sus compinches les arreo

Cada palo, a veces poco humano,

Que los dejo tiesos, tal, por ejemplo,

A los Rojos, que son, en línea recta,

Los hoy Socios de Honor de aquella secta;

 

Hay entre ellos y yo, -si ya lo he dicho,

Lo repito-, una enorme distancia;

Lo que yo escribo en verso lo he sufrido;

De quienes ya descansan en su nicho,

En prosa y en segunda instancia,

No personalmente, ellos lo han oído,

 

O, a lo mejor, tan solo lo han leído;

En boca pues de los Rojos … ¡el colmo! …

Tal dan, como siempre, … ¡peras da el olmo!.

OFERTAS PLATA

¡¡¡ DESCUENTOS ENTRE EL 21 Y EL 40% !!!

Te ofrecemos un amplio catálogo de ofertas, actualizadas diariamente

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Salvador Monzó Romero

Salvador Monzó Romero cuenta la feria según le ha ido y según le va, siempre ante la pantalla de la Televisión, reivindicando desde su sillón-bol, un tanto escorado a la derecha, su derecho a la crítica mordaz y ácida, pero con carácter moralizante.

Lo más leído