No se puede de una mente obtusa
Esperar que diga algo coherente,
Y si encima se cree que a la gente,
Que de Largo Caballero rehúsa
Su memoria bubónica, la engatusa,
Es por no tener dos dedos de frente,
-O sea, es corta-, y aún más sorprendente,
A tope de mierda, -o sea, profusa-,
Tiene la cabellera, cual torrente,
A estas alturas, de ciencia infusa;
Hoy, la Yolanda Díaz, nueva musa
De un Gobierno que mira a Poniente,
Nadie sabe si es un mero accidente,
O es peor … ¡que una cafetera rusa!.