Y ojo a la cantidad,
Pues cada Comunidad su Democracia
Tiene en plena propiedad,
Con tal permisividad,
Que, la que no es una desgracia,
Peor aún, es una calamidad;
Hay por ahí cada demócrata
De Presidente de una Comunidad,
Que ha mutado de gris nómada
A un falso aristócrata
De la Política, su calidad
Saltándosela mejor que un acróbata;
Recurriendo pues al dicho
Popular, es para mear y no echar gota;
Siendo cada cual un bicho,
Que gobierna a su capricho,
Es normal que el País esté en bancarrota,
Con políticos de ataúd y de nicho;
El Ximo Puig, estos días.
Es quien más arrima el ascua a su sardina;
Ajeno a habladurías,
Convierte en homilías
A santa Mónica Oltra, la divina
Encubridora de abusos y tropelías;
Es éste sólo un poner
Para ver que, en un Estado Nacional,
Este modo de joder
La marrana es perder
El tiempo, pues de un Presidente de tal
Calaña, su destino sería pacer
En huertos que, no dando para comer,
Dan, tras secarse el sudor, … ¡el corral!.