Que el Sánchez va a lo suyo no es un secreto,
Lo que diga la gente le importa un higo,
Y si en el Parlamento no encuentra abrigo,
Tira de pluma y, sin ningún respeto,
Aunque ello, además de ser un reto
A los demás Poderes, lleva consigo
El dejar los silos de España sin trigo,
Sin aceite las almazaras y quieto,
Sin poder trabajar el mejor amigo,
Sin subir el cierre el comercio y prieto
El puño para que no pida el mendigo,
Y el transporte de víveres bajo veto …
De ello soy testigo y por eso lo digo:
Así es, si se gobierna por decreto,
Tal que el Sánchez, Dictador de Libreto,
Que, más que un Presidente, … ¡es un castigo!.