El pleno del Parlamento de Navarra ha aprobado, con los votos a favor de UPN, PSN, PPN e Izquierda-Ezkerra, una moción por la que la Cámara foral «condena de manera expresa todas y cada uno de los 947 asesinatos perpetrados por la banda terrorista ETA». Nafarroa Bai se ha posicionado en contra de la moción, mientras que Bildu no ha participado en la votación.
Además, en un segundo punto, el Parlamento ha reprobado «la injustificable historia de terror y dolor a la que ETA y sus cómplices han sometido a los ciudadanos navarros y al conjunto de los españoles, especialmente a las personas víctimas directas de su terrible acción criminal». Del mismo modo, en un tercer apartado, se exige la «disolución incondicional de ETA, la entrega de las armas y la puesta a disposición de la Justicia de sus miembros».
Para defender la moción, el parlamentario del PPN Eloy Villanueva, proponente de la iniciativa, ha considerado necesario «la reparación del daño causado por ETA, el establecimiento de la paz, y mostrar el desprecio sincero a la actividad criminal de la banda terrorista y de todas las organizaciones cómplices de su barbarie».
En su opinión, «únicamente asentando estos principios en nuestra sociedad podremos terminar de construir la sociedad y lograr la imprescindible paz y libertad», ya que, ha defendido que «para lograr la paz, no cabe otro final que el de la disolución incondicional» de ETA y «la rendición de cuentas ante la justicia».
Desde Nafarroa Bai, Patxi Zabaleta ha explicado que la coalición ha presentado una enmienda de sustitución a la moción para «condenar todo tipo de violencia», ya que en la iniciativa presentada por el PPN, ha recalcado, «se excluyen a otras organizaciones».
Ha explicado que «lo que le interesa a la sociedad es la defensa de todos los derechos humanos sin excepción, y la condena de todas las violencias, vengan de donde venga» y ha sostenido que los ‘populares’ «no hablan absolutamente nada de lo que debe ser la primera preocupación, la paz y la normalización política».
En este sentido, José Miguel Nuin, de Izquierda-Ezkerra, ha explicado que la coalición de izquierdas también ha presentado una enmienda de sustitución para «condenar todo tipo de violencias, no sólo la de ETA». Según ha dicho, I-E «repudia y rechaza toda actitud violenta se dé en la circunstancia que se dé, y condena todo tipo de violencia política».
Desde UPN, Eradio Ezpeleta ha condenado con «absoluta rotundidad» el terrorismo de ETA y ha rechazado «lo que ha pasado y lo que sigue pasando cerca de nosotros», ya que, según ha indicado, «ETA sigue actuando por medio de otros» como evidencia «la manifestación por los presos de ETA en Berriozar, los valientes encapuchados del chupinazo de Leitza y el brindis por los presos». En su opinión, estos hechos suponen «un retroceso en la lucha contra el terrorismo, una humillación a las víctimas y una afrenta a toda la sociedad».
Por parte del PSN, Maite Esporrín ha condenado «una vez más todos y cada uno de los asesinatos» y ha vuelto a exigir «la inmediata disolución y entrega de las armas de ETA». No obstante, ha destacado que se vive «una situación de esperanza» porque la banda terrorista «está cada vez más debilita», aunque ha recalcado que «falta lo más importante un alto al fuego definitivo y que entregue las armas sin compensación política».
La dirigente socialista ha considerado «inmoral aprovecharse del sufrimiento de las víctimas para sacar réditos electorales» y ha asegurado que el PPN, con la presentación de esta moción, pretende «demostrar que Bildu no va a condenar los atentos, aunque ya han presentado esta moción en todos los ayuntamientos». A su juicio, «con estos debates estamos haciendo la campaña electoral a Bildu».
Finalmente, la parlamentaria de Bildu Bakartxo Ruiz ha defendido que «este pueblo vive un tiempo nuevo aunque algunos no lo quieran aceptar, un tiempo que exige actitudes nuevas de todos los agentes».
Según ha indicado, «no se puede abrir un tiempo de paz basado en la venganza como dicen el PP y UPN» y ha apostado por dar pasos para «comenzar con un proceso de diálogo» que, en su opinión, «sería la actitud que debería mostrar este Parlamento para lograr la paz y la normalización política». «La moción del PPN quiere poner en evidencia a Bildu, es una moción atada al pasado y basada en una visión unilateral del conflicto, no plantea ningún paso que mire al futuro», ha concluido.
