Unas caricaturas provocaron oleadas de furia, una palabras del Papa, en absoluto agresivas, tan solo afirmaba algo tan sensato como que la fe y la religión no pueden imponerse por la violencia , parecieron convertirle en culpable y obligarle a repetidas excusas, ahora una opera berlinesa suspende una obra de Mozart no sea que se vayan a enfadar los fanáticos musulmanes. ¿Qué es todo ello? Pues algo tan simple y tan absurdo como rendir los principios democráticos, la libertad de expresión, la libertad de pensamiento ,ante los postulados de una teocracia totalitaria.
Como si el Renacimiento no hubiera abierto el camino de liberación del hombre ante los yugos religiosos, como si la Ilustración y la Declaración Universal de Derechos Humanos no hubiera costado esfuerzo , como si toda la filosofía y el pensamiento desde Kant a Descartes, de Voltarie a Rousseau y de Hegel a Marx hubiera de tirarse a la basura y enterrar en la memoria que hubo siglos de batalla, hogueras e inquisición por liberarse de una tiranía para ahora claudicar ante una nueva, tan solo porque en vez de sotanas lleva chilabas y no nos vayan a acusar de poco progres o de xenófobos.
Una par de curtidos políticos socialdemócratas daneses, hombre y mujer, conocidos por su tolerancia y apertura de mente han saltado a la palestra europea con un libro que espero ver traducido cuanto antes en nuestras librerías. Se titula ,”los islamistas y los ingenuos” y es un demoledor alegato contra ese pensamiento ya no débil, sino estúpido, como mucho de esos clichés “políticamente correctos” que acaban dando vivas Hibzula “el partido de Dios” por parte de quienes se presumen de izquierdas, contrasentido tan absurdo como el del movimiento feminista radical encantado con la consideración del mundo islámico hacia la mujer y la ceguera ante las mutilaciones sexuales de tan impuro ser.
Los socialdemócratas daneses, o la presidenta alemana, la democristiana Merkel han elevado estos días su voz en una misma dirección. Sin complejos han dicho que los valores democráticos han de defenderse y que la integración no pasa por rendirlos ante los teócratas ni someterlos a la censura de la tiniebla medieval y el fanatismo islámico. Que el respeto no es claudicación, que la tolerancia no es sumisión, que la integración no debe producirse a costa de la libertad, los derechos y los valores democráticos sino en el seno de ellos y que lo que debe extirparse es a quienes desde el totalitarismo pretenden la imposición de sus fés ,creencias o dogmas. Cualquiera de esta sean y se apelliden nazismo, estalinismo o islamismo. “Hemos ido demasiado lejos con la multiculturalidad” dicen los daneses y so pretexto de ella no pueden arrumbarse los valores democráticos, los derechos humanos y ,en suma, la libertad. No puede el fanatismo imponernos su intolerancia, no podemos nosotros confundirnos de tal forma que asumamos el recorte de nuestros derechos y libertades para no molestar a los teócratas.
Los progres españoles, los de manual y pegatina, deberían leer a los daneses. Bueno ,en realidad, deberían leer algo aunque fuera a Voltaire a Rouseau o Marx. A lo mejor caen en la cuenta que ser progresista en pensamiento y obra es precisamente lo contrario de lo que suponen y de lo que alardean.
P.D Un mes más he de dar las gracias a los visitantes de este blog por batirme todos los records: 12.530 paginas visitadas, tres mil largas más que el mes anterior, para un total de 54.648. Una media diaria de de 418. Tres dias por encima de las mil visitas. Ninguno por debajo de los tres digitos. Las entradas, además de España, han llegado desde 62 paises diferentes. 25 de Europa, 21 de America,10 de Asia, 3 de Africa y 1 de Oceanía Es un privilegio poder contrar con todos vosotros.