Bokabulario

Unos consejos para Mariano Rajoy antes de su debate en TVE-1

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, es el protagonista hoy de la nueva edición del programa de TVE, copiado de Francia, Tengo una pregunta para usted. Me permito darle unos consejos a uno de los mejores parlamentarios de la actualidad.

— Tranquilidad y serenidad. Respuestas breves y en un lenguaje sencillo. Tome el ejemplo de Franklin D. Roosevelt en sus charlas junto al fuego, en la radio de los años 30: tres cuartas partes de sus palabras en esos discursos se encontraban entre las 1.000 más usadas; y pronunciación lenta, de entre 120 y 100 palabras por minuto.

— Sonreír, o al menos tener un gesto amable, y mirar a quien le pregunta.

— No transmitir soberbia ni lejanía.

— Si no se sabe algo, se admite y no se inventa nada.

— Nunca pretenda quedarse con la última palabra, y menos con chulería. Ése fue el error de Rodríguez en la pregunta del café; cuando el cafetero le soltó lo del «abuelo Patxi», el presidente contestó con un «depende» de superioridad que a mí me sentó como un pisotón.

–El lenguaje corporal debe transmitir, al igual que la voz, confianza, espontaneidad y humildad. Sin poses teatrales ni forzadas.

— No se fíe de Lorenzo Milá. Prefiere una ballena antes que a usted. Hay que considerarle como si fuera Antonio García Ferreras. No debe esperar preguntas para lucirse, sino aprovechar las que le planteen para responderlas y añadir sus ideas y sus mensajes.

Estoy seguro de que Rajoy y su círculo se habrán preparado a fondo para este debate, así que algunos de estos consejos serán superfluos.

Al menos, espero que no asistamos a un diálogo como el que nos regaló ZP:

«Señor presidente, sólo quiero saber cuándo me podré comprar una casa», preguntó el joven. Zapatero enumeró todas las propuestas de su Gobierno y un buen número de datos macroeconómicos.
-«Ya, pero yo sigo sin poder comprarme un piso. Aun así, le doy las gracias, presidente», afirmó David en tono lacónico .
-«Te doy las gracias por darme las gracias. Y deseo que tengas la posibilidad de tener un piso», contestó Zapatero.

Cuando recuerdo semejante escena, me vence el pesimismo y pienso que Estepaís no tiene salvación. No sólo por el joven que cree que porque unos demagogos introdujeron un artículo en la Constitución sobre el derecho a la vivienda, el presidente del Gobierno tiene que facilitarle un piso, sino por el presidente que le da las gracias por darle las gracias, en vez de decirle cosas como «tienes que trabajar y ahorrar, y quedarte sin vacaciones unos años». Aunque cómo un político profesional desde los veintipocos años va a recomendar a los jóvenes que curren y se sacrifiquen.

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Autor

Pedro F. Barbadillo

Es un intelectual que desde siempre ha querido formar parte del mundo de la comunicación y a él ha dedicado su vida profesional y parte de su vida privada.

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