Al PSOE le encantaría seguir con lo de los obispos. Pero 132.000 parados mas en enero a quien les ha dejado sin báculo es a ellos y a la campaña sin casulla. El dato es demoledor . Acaba con todos los eufemismos y ya pueden camuflar con el palabro que quieran a la bicha pero la gente es muy consciente de que la nube que tenemos encima trae pedrisco. El aumento del desempleo ha batido el record. Nunca en la historia,desde hace 24 años que se mide por el actual método, un mes había arrojado esta cifra. La más alta habia alcanzado los 90.000 desemplados .
La certeza de la crisis es ya un hecho en las conciencias de los españoles. La mismas encuestas que daban ventaja de tres puntos y pico en intención de voto a los socialistas, y antes de conocerse el desplome del empleo, decía que la situación económica se percibe ya como mala o muy mala para la mayoría . Y hasta para la frágil memoria colectiva no es preciso refrescar que Caldera decía en octubre que esto era “coyuntural” y el quitaba importaría a la primera luz roja que se encendió. Pretender ahora decir , además, que se haga balance de los cuatro años es un ejercicio tan estéril como contraproducente. Claro que estábamos mejor. Lo malo es que es ahora, exactamente ahora, cuando esa bonanza se ha acabado y toca la fea. Con un indicativo todavía más pernicioso : hoy hay más parados en términos absolutos que cuando recogieron el poder de manos del PP. A un mes de las elecciones el Gobierno se ha encontrado con 2.220.000 encima de la mesa. Pepiño Blanco puede seguir acusando de catastrofista al PP y asegurar que según sus datos va a ira votar un 75 por 100 del electorado. Pero la población necesita otro mensaje, otro argumento y el salir muy sonriente en los carteles empieza a no ser nada suficiente para movilizar a los que no son de la parroquia.