Otra vez, y no se escarmienta, sacando pecho. Otra vez pensando tan solo en clave propagandística y en rédito electoral electoral. No hay enmienda, no hay el más mínimo propósito de tenerla . Que hartazgo de políticos, que hartazgo de miserias , que hartazgo de Gobierno. Y de oposición, que me da igual que me da lo mismo. Pero hoy toca Gobierno.
Ha ido Zapatero a la cumbre mundial , invitado y de prestado, no se olvide, y parece que ya somos los salvadores del mundo, que ZP con esa presencia ha acabado de un plumazo con la crisis, con la planetaria y con la nuestra. Ya es todo el vocerio monclovita un alarde , un sonar de fanfarrias y trompetas. Y no es momento. Menos que nunca es ahora momento, menos que nunca necesita tales cosas el pais, menos que nunca ese es el mensaje que ha de darse a la sociedad. Más que nunca España y los españoles necesitamos liderazgo y seriedad. Verdad y objetivos. Seriedad y rutas claras. Más que nunca hay que decirnos lo que pasa, las dificultades que habremos de afrontar, el esfuerzo que va a exigirse de nosotros. Más que nunca es el momento de la recuperación de la cultura del trabajo, el sacrificio y el sudor. Más que nunca.
Y menos que nunca está representación escénica, esta mentira de tramoya, este impostar la voz por un presunto éxito de imagen externa-que en su justa medida no lo niego-cuando lo que toca es asumir y afrontar el problema que tenemos en casa.
Empezó el viernes la vicepresidente, mi antes admirada María Teresa Fernandez de la Vega, vendiéndonos la asistencia de zapatero a la cumbre como el mayor acontecimiento que hayan conocido los siglos, poco menos que como la mayor victoria internacional de España y el alumbramiento de un Mesias. Pero por lo menos lo hizo con cierto estilo. Luego llegó Pepiño Blanco. Y en su boca , el clamoreo de gozo resultó tan patético como irritante. Luego ya fueron todos y esta semana será la catarsis, la elevación a los altares de la relumbrante figura universal de José Luis Rodríguez Zapatero.
Y uno está cada vez más harto de este circo y de estos enjuages. Uno, y le parece que muchos, soporta cada vez menos tales aspavientos. Porque el común de las gentes , esos millones de familias humildes o de clase media, sienten cada día más la angustia de una crisis que tienen encima y cuyas nubes lejos de alejarse se concentran y se vuelven más negras. Enhorabuena presidente por haber sido invitado a la cumbre. Ojala España este siempre presente ya en esos foros, porque tiene derecho y necesidad de estarlo. Bien. Pero, por favor, vayamos a lo nuestro. Estemos a lo que hay que estar. Y por concienciar a las gentes de lo que viene en vez de hacerles creer que jauja regresa. Porque jauja está ya también en la lista del paro.