He regresado ahora del monte y de la noche. He estado en el crepúsculo, en el silencio, en el lejano ulular de búho en el pinar sombrío, he sentido el gruñido de un jabalí en la barranca y el rebullir de un conejo entre los romeros, a mis pies.Ha llegado la sombra, la oscuridad, el frio acuchillando el aire. He buscado en la noche la soledad y en ella he querido sumergirme.
La soledad como vacío, pozo sin agua, agua sin luna .
La soledad como amable, incluso hasta cálida, compañía .