La nueva temporada que se abre promete ser caliente en verdad. Pero no sólo en la política. También va a serlo en lo periodístico, particularmente en lo radiofónico. La salida de Federico Jiménez Losantos de la COPE y su apuesta por una emisora propia promete emociones fuertes. Sin olvidar las conmociones en el imperio PRISA y su batalla con la Sexta, algo que puede afectar de manera directa a los apoyos mediáticos de que ha disfrutado el Gobierno.
El otoño del 2009 augura tensiones entre los medios. Todo ello, encima, en medio de una crisis muy fuerte de la que nadie se salva y que sigue amenazando sobre plantillas, y cabeceras. La caída de ingresos publicitarios está siendo muy fuerte y llueve sobre mojado pues ya el pasado año los resultados fueron muy malos y en algunos caosos de absoluta catástrofe. No se percibe repunte.
Pero además, las aguas bajan revueltas en el sector de prensa que más se ha alineado con el Gobierno. El País amaga con creciente intensidad ataques muy directos al presidente zapatero, aunque parece dejar claro que no por ello va a dejar de seguir mordiendo con informaciones destinadas a la línea de flotación del Partido Popular. Parece, a día de hoy, que en esos parámetros es donde quiere enmarcarse. No escatimar leña al ejecutivo por lo que consideran una “traición” pero circunscrita a la cuestión de las concesiones a la Sexta en materia de televisión de pago y a la política económica en general donde cada vez más el grupo editorial se manifiesta cada vez más crítico con las medidas gubernamentales. Sin embargo, en lo estrictamente político, los medios de grupo no parecen en absoluto variar en sus decididos apoyos y en ser la punta de lanza de seguir golpeando al partido de la oposición por los casos de corruptelas en los que se ven implicados cargos y dirigentes, con particular atención a Madrid, Comunidad Valenciana y Baleares. Buscan así un difícil equilibrio entre su línea editorial, sus propios cuadros y sus lectores al tiempo que han de ajustar cuentas con el sector del Gobierno al que consideran responsables de sus cuitas. A la cabeza de sus “enemigos” está el ministro Sebastián a quien empiezan a buscar directamente la yugular.
Pero el gran morbo estará en las ondas. Y tiene nombre propio : Federico. Y todas las incógnitas abiertas. ¿Logrará abrirse un hueco con unos medios que se revelan cada día mas endebles?. ¿Morderá a su antigua casa tal bocado que la emisora de la Iglesia se vera abocada a situaciones de riesgo? ¿Podrá aguantar Nacho Villa una ”mañana” que hasta ahora estaba marcada, para bien y para mal, por la personalidad amada u odiada, aquí no hay término medio, de su conductor?.
Y dentro de todo ello ¿Qué hará Pedro J?. Va a apoyar y embarcarse con toas sus armas y bagajes con Federico?. Pues parece que del todo, del todo, no. Que ha de velar por su intereses y los de su medio y necesita , hoy por hoy, altavoces potentes?. O sea, que si pero con velas puestas en otros altares y además tiene uno propio, su televisión digital a la que quiere dar un impulso decisivo a partir de ya y empezar a sonar con toda la fuerza. Es el momento y no puede perder tiempo porque otros referentes, por ejemplo Intereconomía, le disputan ese espacio y tienen leve ventaja. Vamos , que nos vamos a divertir un poco. Quizás el que más Carlos herrera al que le pueden caer “propinas” muy substanciosas en el río revuelto en que andan los demás pescadores. Ya verán la que se lia con el primer EGM.