Quizás sea ya tarde para quienes tenemos entre 50 y 18 años, pero al menos el remedio al mal empieza a saberse en los pasillos de los poderosos que en teoría están a nuestro servicio.
Es más fácil para un socialista, sea burócrata, sea político, sea democristiano, sea socialdemócrata, sea reformista, controlar una sociedad basada en las finanzas que en la industria, porque en el primer caso te basta controlar a los bancos mediante el tipo de interés oficial y las inspecciones… aunque quizás acabe él dominado por los bancos.
Las oligarquías europeas se decantaron hace tiempo por desmantelar la industria y fomentar los servicios financieros. El primer sector económico del Reino Unido es el financiero y Londres pugna por ser el centro mundial de las finanzas, como ya lo es de Europa. La consecuencia de esta decisión estratégica la tenemos ante nosotros: crisis económica, empobrecimiento, dependencia de las inversiones árabes y chinas, pérdida de puestos de trabajo en la industria y su sustitución por camareros, guías de turismo, limpiadoras de hotel, monitores de esquí… Europa cada vez más cerca de ser un museo. Pero seguimos con nuestros políticos y funcionarios.
Al menos un eurócrata reconoce que se equivocaron.
Europa debería haber apostado por la industria, no por las finanzas
El vicepresidente de la Comisión Europea (CE) y responsable de Industria, Antonio Tajani, admitió hoy que dar prioridad a las finanzas y no a la industria ha sido un error que no se debe volver a repetir.
«Cometimos errores en el pasado al poner en el centro (de la política económica) las finanzas y solo los servicios. Arrinconamos la industria y las empresas. Y hay que hacer lo contrario: Poner en el centro la industria y las empresas, y usar las finanzas para ayudar a la economía real», indica en una entrevista a Euronews.
