¿Denuncias falsas en ‘violencia de género’? ¡Pero cómo se atreve! ¡Qué indecente! ¡Será rojo!…
Los progres, cada vez se parecen más a la caricatura de las señoras de derecha que han dibujado durante décadas. Si se ponen en duda sus dogmas y creencias, reaccionan como las marquesonas ante el nieto melenudo. Lo malo es que los progres disponen del poder del Estado para cortar el pelo al greñudo.
Creencia oficial: apenas existen denuncias falsas presentadas por mujeres sobre maltrato. Creencia compartida por políticos del PP, por cierto, como la ex senadora Dorinda García.
La realidad es que las denuncias falsas se usan por inmigrantes ilegales para conseguir papeles y subvenciones.
La Guardia Civil ha desmantelado una red que ofrecía a mujeres inmigrantes, sobre todo marroquíes, regularizar su situación y acceder a ayudas públicas mediante falsas denuncias por violencia de género hacia sus parejas residentes en España, que la propia banda les buscaba en Almería, principalmente hombres de la misma nacionalidad, a quienes la banda ofrecía entre 2.000 y 4.000 euros por interpretar su papel de maltratadores.
Por supuesto, esta noticia, como las que desmienten el tópico del calentamiento global por obra de los seres humanos, no ha aparecido en las televisiones.
¿Y por qué el Gobierno del PP no deroga esta ley de violencia de género, junto con las demás del proyecto de ingeniería social de ZParo? En ese caso tendrían mi voto.
CODA: En cambio, este maltrato femenino –violaciones por inmigrantes ilegales en la calle– es políticamente correcto: los agresores, libres e impunes. Aquí no hay familias que destruir ni confianza entre el hombre y la mujer que eliminar.
