Al final, El País tenía un precio, y no el de los kioscos. Mucho más alto, que estamos tratando con la clase moralmente superior. ¡En esto ha quedado el periódico que dirigió la transición!
Ya sabemos por qué El País, por medio del redactor José Manuel Romero-Salazar Pérez-Cejuela (oseaaaaa, un tipo divino de la muerte), se ha dedicado a MENTIR para proteger a la familia Pujol y a Mad Mas de los indicios de corrupción.
El Mundo y La Gaceta (cuya portada reproduzco aquí) lo explican en sus ediciones del día de San Esteban. Cito unos párrafos de la información de El Mundo:
Oleguer Pujol Ferrusola hizo ganar a Prisa 242 millones de euros en 2008 al comprarle las sedes históricas del Grupo en Madrid (Gran Vía y Miguel Yuste) y Barcelona (calle de Caspe). El hijo pequeño del ex presidente de la Generalitat, de 40 años, pagó entre 300 y 315 millones por los tres inmuebles -Prisa ha facilitado las dos cifras-.
Oleguer Pujol ejecutó la inversión a través de Drago Capital, un conglomerado cuyos tentáculos acababan en la Isla de Guernsey, paraíso fiscal situado en el Canal de la Mancha. El casero de Prisa, cuyo diario de cabecera, El País, ha criticado a la Policía por investigar el patrimonio de los Pujol, controla en estos momentos todo este patrimonio inmobiliario a través de una sociedad de Luxemburgo.
(…) Su dominio total sobre los inmuebles que ocupa Prisa ha coincidido en el tiempo con el acercamiento del grupo a CiU y, más concretamente, a Jordi Pujol y Artur Mas. Para muestra, dos botones: la asistencia de Juan Luis Cebrián e Ignacio Polanco al primer acto del presidente de la Generalitat en Madrid tras su desafío independentista y el «encuentro» organizado por El País hace dos semanas bajo el título Cataluña-España y en el que se juntaron Jordi Pujol, Mas, Felipe González, Rubalcaba y Cebrián.
Precisamente, El País ha censurado en los últimos días a Interior por investigar el tan espectacular como sospechoso patrimonio del clan del ex presidente de la Generalitat. El rotativo asegura que la Policía no puede llevar a cabo pesquisas sobre la familia Pujol -cuyo hijo pequeño es su casero, circunstancia que siempre omiten- «sin autorización judicial». El sindicato mayoritario de la Policía, el SUP, negó anteayer este extremo, subrayó que los agentes pueden efectuar indagaciones preliminares y reclamó que no se trate al líder histórico y a su familia «de forma distinta» al resto de los ciudadanos.
Mediante las subvenciones y las suscripciones oficiales, los Pujol han construido un sistema político en Cataluña en el que no existe la prensa libre. Este sistema de corrupción se está extendiendo al resto de España, como demuestra lo sabido de El País. Otro motivo más para que la señora Cataluña se vaya de una vez y deje de corrompernos.
¡Cómo han cambiado los tiempos! Cebrián es infinitamente más rico que cuando trabajaba en la prensa falangista, pero se cree que estamos en los años 80, cuando El País atemorizaba a medio PSOE y a toda la derecha acomplejadita. En PRISA pensarían que nadie se atrevería a investigar sus relaciones con la dinastía Pujol y, mucho menos, a publicarlas.
¿Volverá el Rey a entregar los Premios Ortega y Gasset de periodismo, que concede PRISA? Admito apuestas.
CODA: A los separatistas les entusiasman los uniformes y las pistolas. Tanto Urkullu como Mad Mas se han fotografiado rodeados de ertzainas y mozos. ¡Lo que dirían, con El País dirigiendo al Imperio Progre si Rajoy se pasease flanqueado por guardias civiles con uniforme de gala. ¿Están jugando al cardenal Cisneros cuando dijo «Estos son mis poderes»?
