La Marea de Pérez Henares

El «ensusanamiento» del PSOE

Cuando Rubalcaba la contempla con aparente embeleso y loa su “poderío” a uno no puede por menos que aparecérsele la imagen de aquella Rocio Jurado en plenitud cantora y por contraposición asemejarlo a él con atribulado y disminuido Ortega Cano.

El PSOE ha sufrido un proceso rápido y profundo de enajenación mental transitoria aguda, que es la manera científica de definir el enamoramiento de flechazo, impacto y rendición incondicional a unos encantos sin tacha donde el enamorado no percibe defecto alguno, ni sombra siquiera, en la amada perfecta. Estos amores, con proclama de eternos, hay también cálculos estadísticos, suelen durar entre tres meses y el año.

Que no será así en este caso. Nada más lejos que ir de agorero contra los dichosos amantes. Seguro que son felices y Susana gana unas elecciones. Que por ahora ese es un pequeño problema. Ganar, lo que se dice ganar, de puertas afueras del partido, no ha ganado nada. Ella siempre ha jugado en casa.

El PSOE esta “ensusanado”. Es todo un fenómeno que tiene perplejo al fino estilista, sevillano además, y nuestra mejor muleta nacional pluma en mano, Ignacio Camacho. ¿Que ha hecho o dicho esta señora para despertar tales pasiones?.- se pregunta. Los caminos del amor son inescrutables, querido Ignacio, pero algo tienen que ver con el vacío, el ansia de revivir pasados amoríos de vino, triunfo y rosas, de rememorar pasiones y volver a sentir el corazón latiendo apasionado. Que eso nos ha pasado a todos y era hasta de carril que le pasara al cuerpo abandonado y ansioso de ilusiones del PSOE. Ni Rubalcaba ni los que dicen que van a ir a las primarias, Pachi, Page, Madina o Chacón,(esta pudo ser pero le dijeron no una vez en el altar mismo) son, así a primera vista, gente que arrebate mucho, la verdad, ni que seduzca hasta hacer perder los sentidos. La Chacón iba por ahí, sí, pero se pasó en la copla, se le fueron los agudos y cantó el gallo.

Ahora es Susana. Que hacer pues no, hasta el momento fuera de su nido no ha hecho nada. Pero dentro, la hormiguita guerrera, lo ha hecho todo hasta convertirse en hormiga reina. Subiendo, subiendo hasta conquistar el hormiguero. Dicen que feroz y tenaz en su empeño y desde luego sin pasar por urna alguna, sus primarias fueron aquellas que no fueron, pero que ahora tiene extasiada y en clamor a la colonia entera y quiere exportar modelo. Aunque gobierne una comunidad donde su partido ha mandado siempre y haya logrado el record absoluto de paro, mundial será, pero también un régimen clientelar donde el subsidio y la caridad socializada y gubernamentalizada sustituyen al trabajo y a la creación de riqueza pero que cautiva el voto que no veas. De la corrupción, que si no está institucionalizada lo cierto es que parece muchísimo, y donde la señora Díaz, que no ha vivido en otro lado ni hecho otra cosa que ser parte del del partido y del gobierno que la han generado y convertido en instrumento político, no sabia ni por lo más remoto nada del asunto. Ni oír de ello, vamos.

Decir eso sí que ya ha dicho algo. Y quizá ello, amigo Camacho, por muy obvios que fueran los trinos es lo que ha subyugado. La cositas que ha dicho, por muy evidentes, sencillas, simples y hasta de mínimo catón socialista, que fueran han tenido mucho impacto porque resulta que por allí tras lustros de zapateril deriva y aunque ella fuera de sus huestes más afines no las decía nadie y el mero hecho de enunciarlas ha desatado tal tumulto. Solo pronunciar la palabra España y defenderla unida y sin que valga expropiar soberanía popular por un territorio, o señalar que no puede combatirse la corruptela (otra cosa es pasar de la prédica al trigo) usándola como arma arrojadiza y distinguiendo siempre entre la propia, siempre venial, y la ajena, merecedora segura del infierno. Solo eso ha sido una novedad, porque era toda una sorpresa escuchárselo a un socialista. Y muchos socialistas estaban deseando oriselo a alguno de los suyos

En cualquier caso, hay flechazo. Pero también un problema. Porque resulta que la novia está comprometida, casada en gananciales si me apuran . La deseada Susana no podrá ser, o ese se dice y se asegura a ella misma a hoy en día, la desposada del socialismo en España. No podrá ser la elegida en primarias ni secretaria general ni cartel nacional. Porque acaba de celebrar esponsales con Andalucía e iba a quedar fatal el abandono del hogar a los dos días.

Así que los arrebatados socialistas van a tener que elegir a otro u otra, como dicen ellos siempre en el discurso,cuando en realidad su corazón está entregado a ella. Va a ser quien ella quiera, muy posiblemente, pero no será lo mismo y eso siempre acaba en pelea y celos. El PSOE va a entregarle las arras a un líder no amado porque no pueden darle el si a la amante sevillana. O, los tiempos son desesperados en política y en el amor, arramblan con todo, se saltan plazos, hasta hay unas elecciones inmediatas por el sur y entonces ya triunfante lo deseada se viene para Madrid para intentar ser la primera ama de la Moncloa. Improbable, pero imposible no hay nada.

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Autor

Antonio Pérez Henares

Ejerce el periodismo desde los 18 años, cuando se incorporó al diario Pueblo. Ha trabajado después en publicaciones como Mundo Obrero, Tiempo, El Globo o medios radiofónicos como la cadena SER. En 1989 entró al equipo directivo del semanario Tribuna, del que fue director entre 1996 y 1999. De 2000 a 2007 coordinó las ediciones especiales del diario La Razón, de donde pasó al grupo Negocio, que dirigió hasta enero de 2012. Tras ello pasó a ocupar el puesto de director de publicaciones de PROMECAL, editora de más de una docena de periódicos autonómicos de Castilla y León y Castilla-La Mancha.

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