Este viernes, 17 de enero de 2014, Federico Jiménez Losantos publica en El Mundo una columna titulada ‘El juego sucio de Gallardón’, en la que arranca diciendo:
La nota denigratoria del fiscal Horrach contra el juez Castro, sin precedentes en la literatura forense y sin antecedentes que no hayan resultado penales para sus autores, muestra el juego sucio del Gobierno de Rajoy, en particular del Ministerio de Justicia y su inflamado apéndice de la Fiscalía del Estado
Añade que:
De creer las injurias del fiscal al juez, las mentiras del ministro y las lagrimitas de la prensa, lo que se juzga -lo que se intenta juzgar, porque el Rey y el Gobierno lo han impedido hasta ahora- no es el robo de dinero público por unos pájaros de la Familia Real sino el trato obsequioso que debemos observar con las clases superiores
Y concluye:
Lo que está en juego es la soberanía del pueblo español, de la que, según la Constitución, «emanan todos los poderes del Estado», incluida la Justicia. Esa soberanía nacional está por encima de monarquías y repúblicas. Y muy por encima de los miembros podridos de una de las Familias Reales -no la única- que pueblan la historia de la nación española