Este martes, 28 de enero de 2014, Juan Carlos Girauta publica en ABC una columna titulada ‘Jaime y Alejo’, en la que arranca diciendo:
A nadie puede sorprender la decisión que he adoptado», dice Mayor Oreja. Desde luego, a mí no me sorprende. Aunque quizá, más que a público y medios, el ex ministro del Interior apunta a su jefe por tardar tanto a la hora de mover el dedo índice: «Serás el candidato»
Añade que:
Hay cosas que cada vez se aguantan peor con la edad, y el arte de Rajoy -igual en esto que Aznar- para mantener a los suyos con el alma en vilo hasta el último minuto ya le irritaron bastante a don Jaime hace cuatro años
Y concluye:
Luego está el misterio de la comunicación en Génova 13. Ni guiados por su peor enemigo podrían haber trabajado tanto en contra de sus intereses.
Alguien allí creyó que la mejor forma de apagar el fuego de la marcha de Vidal-Quadras en el día de ayer, de lidiar con la esmerada cobertura mediática del escindido, de diluir la sensación entre la opinión pública de que asistíamos a una seria crisis en el partido del Gobierno, era arrojar sobre las llamas la gasolina del mutis por el foro de Mayor Oreja
