Este viernes, 7 de marzo de 2014, Raúl del Pozo escribe en El Mundo una columna titulada ‘El cigarral y la mochila’ en la que arranca diciendo:
Decían que la política es la conspiración permanente, pero ni siquiera, cuando han llegado los idus de marzo, se ha descubierto conjura alguna; todo lo más, intrigas, maquinaciones, salvamentos en los naufragios mediáticos y la eterna pelea en los organigramas de los partidos.
Añade que:
La lucha por el poder ha degenerado hasta convertirse en enjuagues por colarse en las listas electorales.
Y concluye:
Parece que a la mano derecha de Rajoy no le desagradaría ser ministro de Exteriores, y a Alberto Ruiz-Gallardón no le importaría suceder a María Dolores de Cospedal en la secretaría del partido