Este lunes, 10 de marzo de 2014, Anton Losada escribe en eldiario.es una columna titulada ‘El día del hombre guay’ en la que arranca diciendo:
Todos los años celebramos el día de la mujer, que algunos se empeñan en seguir apellidando como «trabajadora». No existe día del «hombre trabajador». Será porque no hay, o porque no hace falta. Lo más parecido es el día del Padre
Añade que:
Cada año las mujeres deben constatar la misma sangrante evidencia: la igualdad se presenta más difícil de alcanzar que la linea del horizonte.
Y concluye:
Si lo hombres pariéramos, habría aborto libre. Si los hombres cobrásemos la tercera parte menos que las mujeres por el mismo desempeño, las cárceles estarían llenas de empresarios sexistas