Este 27 de marzo de 2014, Federico Quevedo escribe en El Confidencial una columna titulada ‘España necesitaba un mito’ en la que arranca diciendo:
Estos dos últimos días, y el fin de semana que les ha precedido, han sido muy intensos en emociones, sin duda alguna. Para toda una generación, la que vivió la Transición, la muerte de Adolfo Suárez supone cerrar una página de nuestra historia reciente
Añade que:
No recuerdo quién me dijo el lunes por la mañana, después de haber rezado ante el féretro del presidente Suárez, que probablemente ha sido de todos nuestros presidentes el que más se ha parecido a un presidente norteamericano
Y concluye que:
Es verdad, y de hecho si pudiéramos comparar lo que significa Adolfo Suárez para los españoles lo podríamos igualar a lo que para los americanos significa John F. Kennedy