Este 29 de abril de 2014, Jesús Maraña escribe en infoLibre una columna titulada ‘Indignante, señor Blesa‘ en la que arranca diciendo:
Ha aprovechado el señor Miguel Blesa su cita (como testigo) en el juicio que se sigue contra el juez que lo encarceló para declararse indignado por el trato recibido. Tal queja merece algunas consideraciones.
Añade que:
Es indignante que Miguel Blesa, el amigo al que Aznar colocó en la presidencia de Caja Madrid y cuya gestión ha provocado el mayor agujero de la banca española tapado con dinero público, se queje en sede judicial del «sufrimiento personal y familiar» y del daño causado a su «prestigio profesional».
Y concluye que:
Es indignante que la maquinaria judicial funcione a un ritmo frenético cuando se trata de juzgar a un juez que presuntamente prevaricó al encarcelar al banquero y lleve la velocidad de un paquidermo cuando se trata de juzgar a los banqueros que por acción o por omisión se fumigaron los ahorros de decenas de miles de clientes.