Este 30 de abril de 2014, José García Abad escribe en El Plural una columna titulada ‘En Europa de juega de farol‘ en la que arranca diciendo:
Si la prima de riesgo española y de otros compañeros en desgracia de la Unión Europea ha bajado hasta donde ha bajado no es por la única razón seria que lo justificaría: las expectativas de crecimiento sostenido.
Añade que:
Ahora que la economía de la eurozona bordea la deflación, lo peor que pudiera ocurrirnos – bendita sea la inflación que achica las deudas – habría que pedir a Mario Draghi, el Gran Chamán, que anuncie otro farol para animar la inversión y alejarnos del precipicio.
Y concluye que:
Los países periféricos de la Unión deberían unirse para reclamar todo el poder para Mario Draghi, o por lo menos el suficiente para equilibrar el de Ángela Merkel, la canciller del Cuarto Reich.