Este domingo 15 junio 2014 Juan Cruz titula Facilidad de palabra su columna de opinión en El País.
A los niños ingleses les enseñan a defender aquello en lo que no creen y aquello en lo que creen; de ese ejercicio, en la escuela, en la universidad, han salido algunos de los mejores parlamentarios del mundo; pero también gracias a esa enseñanza se han formado escritores como Christopher Hitchens o Martin Amis, ilustres polemistas, capaces de ponerse en una trinchera y luego en la otra, tan sólo por el gusto de discutir.
Añade:
Esa práctica de no quedarse tranquilo con un argumento y buscar las razones del contrario se hizo imprescindible en la época socrática y ha seguido hasta nuestros días, aunque en España ya se sabe que el garrotazo imperó mucho más que el entendimiento.
Y concluye:
Los charlatanes, esos personajes cuya facilidad de palabra los hace parecer brillantes e indestructibles, cuando lo que de verdad manejan son lugares comunes que amasan con la destreza de los vendedores de feria. Ahora hay mucho de eso en España, y sobre todo en la política y en la prensa española.