Este 17 de julio de 2014, escribe Pablo Molina en Libertad Digital una columna titulada ‘Pedremos’ en la que arranca diciendo:
La primera decisión política de Pedro Sánchez al frente del PSOE ha sido traicionar un compromiso adquirido por su partido y votar para la presidencia de la UE junto a los cazadores de unicornios de Pablemos y los lepenianos,
Añade que:
Pedro Sánchez podría haber ordenado a sus catorce «compañeros y compañeras» que se abstuvieran en la votación, haciendo honor a esa vocación tercermundista de grupo no alienado que tanto le ha gustado cultivar siempre a nuestro progresismo más cateto.
Y concluye que:
La cuestión ahora es si Pedro Sánchez quiere convertir a su partido en un Pedremos o en el PSOE de no los no alineados