Este 24 de julio de 2014, Francisco Marhuenda escribe en La Razón una columna titulada ‘La encrucijada‘ en la que arranca diciendo:
Desde Pujol hasta nuestros días, el Gobierno catalán ha financiado generosamente a las numerosas asociaciones independentistas que hay repartidas por Cataluña.
Añade que:
Un sector de los empresarios y financieros han abrazado, también, el independentismo, aunque no hace demasiado tiempo sus padres o abuelos acogían con satisfacción la victoria franquista en la Guerra Civil.
Y concluye que:
La falta de criterio del presidente de la Generalitat le ha hecho transitar de la indiferencia hacia el nacionalismo, a abrazar la nación catalana como nueva utopía que nos conduciría al edén y, finalmente, a erigirse en el sumo pontífice del independentismo.