Este sábado 6 septiembre 2014 Enric González titula Historia su columna de opinión en El Mundo.
Alguien del Instituto Cervantes, o del Ministerio de Asuntos Exteriores, ha cometido un error lamentable. Lo de posponer un acto en torno al escritor Albert Sánchez Piñol y su novela Victus porque la fecha es «sensible», se supone que por la proximidad del 11 de septiembre, constituye una idiotez sin atenuantes.
Añade:
Sánchez Piñol resulta ser un ciudadano favorable a la independencia de Cataluña. Bueno, qué se le va a hacer. La novela, Victus, escrita originalmente en castellano, de la que se han vendido más de 200.000 ejemplares y entre cuyos lectores figura Mariano Rajoy, gira en torno al sitio de Barcelona y su caída ante las tropas borbónicas, comandadas por el duque de Berwick. Es una novela histórica no necesariamente fidedigna.
Y concluye:
La historia es compleja. Mucho más, por supuesto, de lo que establece el pueril corpus ideológico del independentismo catalán. Y el Instituto Cervantes, dedicado a la promoción de la cultura hispánica, debería comportarse, a diferencia del independentismo, de forma tolerante e inclusiva. España, señores, también es la bronca catalana, como fue muy español el terrorismo de ETA. Dejemos hablar.