Raúl Rivero publica este 26 de septiembre de 2014 en El Mundo ‘Cambio sin brújula’:
LAS transformaciones económicas que el Gobierno de Cuba impone en el país a cámara lenta y obligado por el fracaso del socialismo ha creado una enorme ilusión. Lo malo del caso es que el ensueño provocado por las aperturas del régimen se hace materia nada más que en las carpetas de los inversionistas extranjeros y en las vidas de un sector de la sociedad criolla vinculado a los grupos de poder.
Sigue:
Los capitalistas ven la posibilidad de participar con su dinero y hacer negocios en los dominios que arruinaron los funcionarios del Estado y su sistema fallido
El delirio de los cambios del régimen, que ha causado entusiasmo también en la Unión Europea, no tiene fuerza para llegar, por ejemplo, a importantes grupos de jóvenes aferrados a la idea de hallar su bienestar fuera de Cuba.
Pero el escenario real de frustración y desesperanza ha provocado el repunte de una categoría de viajeros que atrae a la prensa. Son los balseros, personas que inventan aparatos extraños que flotan y navegan y se juegan la vida por cumplir otros sueños.
Continúa:
Las autoridades norteamericanas afirman que 16 mil cubanos llegaron por esa vía a Estados Unidos en los últimos 11 meses.
Finaliza:
El número de balseros crece y, según la prensa miamense, 780 cubanos han alcanzado las playas al sur de Florida desde el primero de octubre de 2013. No hay cifra de los que se quedaron en el mar.
La ilusión de los cambios tiene que enderezar el rumbo.