Este 21 de octubre de 2014, escribe Fernando Jáuregui en Europa Press una cloumna titulada ‘La prueba del 9 se llama Rodrigo‘ en la que arranca diciendo:
La gran carencia, y acaso la gran virtud, de Mariano Rajoy consiste precisamente, dicen sus exégetas y también sus detractores, en que transita por ese corredor sin ida ni retorno, en una aparente clandestinidad oficial que da la impresión de que no se entera de nada, no se altera por nada, no decide nada, de que hace como los monos sabios no viendo, no hablando, no escuchando lo que ocurre a su alrededor.
Añade que:
Ahora, se erige ante Rajoy una cuestión que es como la prueba del nueve, y hasta del 9-n: ¿qué va a hacer con Rodrigo Rato?
Y concluye que:
Lo malo es que no hay certificado oficial de la podredumbre, y Mas, que está como enloquecido, es capaz de cometer todos los errores posibles, con consecuencias para él y para todos nosotros, en las menos de tres semanas que faltan para lo que aún podría ser, y ojalá no sea, el gran estallido.