Este 22 de octubre de 2014, escribe Federico Quevedo en El Confidencial una columna titulada ‘Ébola, epidemia de insensatez’ en la que arranca diciendo:
La auxiliar de enfermería Teresa Romero ha superado el ébola. Esta es la buena, buenísima noticia, que nos dio ayer el equipo médico que la atiende: las dos últimas pruebas -la segunda realizada ayer- dieron negativo, lo que significa que no hay rastro del virus en su sangre.
Añade que:
Los expertos en la agitación y la propaganda ya estaban organizando las manifestaciones ante las sedes del PP el fin de semana del 11 de octubre, cuando la salud de la auxiliar de enfermería había empeorado mucho y se temía por su vida, y sin que se hubiera llegado a producir el fatal desenlace ya estaban convocando en las redes sociales a manifestarse contra el PP y el Gobierno en toda España.
Y concluye que:
No, el riesgo cero no existe y esto puede volver a pasar. Por eso es tan importante todo lo que se ha aprendido, y por eso es tan importante que, si ocurriera, fuéramos capaces de no hacer de nuevo demagogia y populismo y sí de utilizar el sentido común y la serenidad.