Este 12 de noviembre de 2014, escribe Marcos Paradinas en El Plural una columna titulada ‘El Marco Polo de Badajoz‘ en la que arranca diciendo:
Cuando uno abre demasiados frentes corre el peligro de no saber por dónde le van a venir los golpes. Esta lección, que ya aprendió Napoleón, la ha vivido ahora en sus carnes el presidente extremeño, José Antonio Monago, que todavía no sabe de dónde ha surgido esta conspiración contra él para afearle su talante de trotamundos con cargo a las arcas públicas.
Añade que:
La relación de preguntas de Monago en el Senado sobre Canarias se reduce a una lista de cinco y todas estaban relacionadas con Aminatou Haidar y su huelga de hambre en el aeropuerto de Lanzarote.
Y concluye que:
Mariano Rajoy ya le ha dado «total apoyo» y, basándonos en la experiencia de Matas, Bárcenas y compañía, el abrazo de Rajoy es el paso previo necesario para caer en desgracia.
