Este 20 de noviembre de 2014, escribe Pablo Planas en Libertad Digital una columna titulada ‘Rechifla general en Cataluña’ en la que arranca diciendo:
El 9 de noviembre continúa. Los catalanes tienen de plazo hasta el próximo martes día 25 para votar en el referéndum que según Rajoy no se ha celebrado pero por el que Torres-Dulce se va a inmolar en la pira de la Ley.
Añade que:
Es mucho más fácil y menos arriesgado desobedecer al Tribunal Constitucional que a la Generalidad, cuyo control, uso y abuso de los resortes estatales en Cataluña financia el Gobierno del PP sin límite de crédito, como una tarjeta negra.
Y concluye que:
Mas corre el riesgo de que se le descoyunte la prognática mandíbula de Habsburgo mientras escribe la carta a los Reyes Magos. Aún se acuerda del primer movimiento de Rajoy: encargar al ministro de Exteriores el caso catalán.