Este 3 de diciembre de 2014, escribe David Torres en Público una columna titulada ‘Cospedal en diferido’ en la que arranca diciendo:
El martes por la mañana, temprano, María Dolores de Cospedal se levantó con el pie izquierdo y sugirió la posibilidad de un pacto de gobierno entre el PSOE y el PP «no para neutralizar a nadie sino para garantizar la gobernabilidad del país».
Añade que:
A Pablo Iglesias le tienen tanto respeto que ya ni lo citan de frente, igual que cuando Mariano entrecomilla a sus otrora conocidos que hoy se revuelcan en el fango de la corrupción, no vaya a pensar la gente que en un tiempo lejano él tuvo algo que ver con cierto ministro de Economía que fundía tarjetas de crédito de madrugada o con cierto tesorero entre rejas al que mandaba mensajes de ánimo porque él con el móvil es un manazas.
Y concluye que:
Cospedal se arrepintió en seguida de sus palabras, y a poco de clarear la tarde ya se las había comido con patatas.