Este 27 de enero de 2015, escribe Pablo Planas en Libertad Digital una columna titulada ‘De la patria y de la pela’ en la que arranca diciendo:
El mayor éxito del catalanismo es haber logrado establecer un sistema esencialmente corrupto que no cuestionan ni los podemistas de nuevo cuño, que deben pasar primero un examen de catalanidad.
Añade que:
Eufemismos al margen, Oriol Pujol, el que iba para presidente de la Generalidad, se pudo lucrar hasta de las primeras fugas de multinacionales en Cataluña dado el sesgo que tomaba la situación política. Las empresas se daban el piro y los amigos de uno de los siete enanitos ponían el cazo y pasaban el cheque.
Y concluye que:
Que nadie se altere. El presidente de la comisión de investigación que debe interrogar al president es David Fernàndez, el líder antisistema en versión autóctona que se daba abrazos con Mas la noche del 9N.