Este 27 de febrero de 2015, escribe Antonio Martín Beaumont en El Semanal Digital una columna titulada ‘Arriola pone en solfa el peligro del «efecto Rivera» para el PP’ en la que arranca diciendo:
El PP ahora sí afronta su paso del Rubicón. Hasta hoy, en el escenario electoral que se está formando en España (por un lado el eje izquierda- derecha, en el otro la vieja-nueva política) le había tocado bailar con la pareja más cómoda: Rosa Díez y su UPyD. Vamos, casi una bicoca.
Añade que:
Seguramente estamos ante el rival más peligroso para Rajoy en las próximas elecciones generales por el codiciado magma del centro. No voy a cargar contra los asesores de La Moncloa y Génova que señalan (tozudamente) que el espacio del PP no lo ocupan otros partidos. No son ellos, aunque se llamen Pedro Arriola, los que toman las decisiones en el mayor partido de centro derecha español.
Y concluye que:
Porque Pablo Iglesias no compite con Mariano Rajoy por el mismo electorado. Y, además, el centro derecha, tras el hundimiento del PSOE, necesitaba un nuevo adversario como Podemos (que tanto interés despierta) para contraponerse.