Este 16 de abril de 2015, escribe Pablo Planas en Libertad Digital una columna titulada ‘De Perpiñán a las mezquitas’ en la que arranca diciendo:
A los nacionalistas catalanes les ha sobrevenido un ataque de espiritualidad que por primera vez en la historia nada tiene que ver con la Virgen de Monserrat.Todos a una han salido en defensa del islam, de un islam que dicen que es pacífico y dialogante, como el propio nacionalismo; un islam integrador y constructivo.
Añade que:
Mientras tanto, los prebostes del proceso separatista prometen el oro al moro, convertir las plazas de toros en mezquitas y certificados de arraigo con cuatro horas de clases de catalán.
Y concluye que:
Tal vez tanto diálogo interreligioso y multicultural esconda el trenzado de una Alianza de Civilizaciones, algo así como un pacto o una tregua entre Cataluña y el islam. No sería la primera vez ni el primero de ERC que viaja a Perpiñán.
