Este 8 de mayo de 2015, escribe Cristina Losada en Libertad Digital una columna titulada ‘Podemos, el jazz y las supernovas’ en la que arranca diciendo:
En una ocasión, John Lennon dijo algo muy despreciativo sobre el jazz. El jazz, sostuvo, es sólo un grupo de tíos viejos que beben cerveza en los bares, fuman en pipa y no escuchan la música. Si bien se mira, es una acertada descripción de los votantes de los grandes partidos.
Añade que:
El parón en el ascenso ya lo detectaron otros sondeos, y este último indica que el poder de atracción de Iglesias y compañía sufre un grave menoscabo. Tan notable que induce a preguntarse si Podemos es un partido supernova: un partido que nace como una explosión de luz intensísima pero se apaga al cabo de poco tiempo.
Y concluye que:
Los dos grandes partidos, aun debilitados, mantienen su condición de partidos de gobierno, mientras los dos emergentes se disputan el papel de árbitros. Nadie se atreve a predecir qué ocurrirá de aquí a las generales, y yo menos que nadie, pero esto ya parece un panorama más realista. El jazz no ha muerto.